Se trata de una de las ermitas más antiguas y devocionales de la antigua Huerta de Alicante. Está situada en la calle Ramón de Campoamor, frente a la finca Buena Vista. Antiguamente el enclave era un camino que comunicaba Sant Joan, Benimagrell y Santa Faz. La ermita del siglo XVI se construyó para conmemorar el milagro de la lágrima de la Virgen de Dios de Loreto, patrona de Mutxamel, que tuvo lugar el 1 de marzo de 1545.
Una placa cerámica colocada sobre la puerta nos recuerda este hecho. La insignia reza: “Aquí va plorar la Mare de Déu de Loreto, 1 de Març de 1545”. Cuentan las crónicas que por aquella época el Camp d’Alacant sufría una terrible sequía. La desesperación era tan profunda que se organizó una rogativa que trasladara el retablo de la virgen desde la iglesia de Mutxamel hasta el monasterio de la Santa Faz.
Regresando de la procesión camino de Sant Joan, el portador de la tabla, Don Mosén Llorenç Boix, se detuvo exhausto por el esfuerzo de cargar con la pesada figura. Fue entonces cuando todos los presentes vieron como las lágrimas brotaban de los ojos de la virgen. Al poco tiempo de aquel episodio comenzó a llover, por lo que los vecinos atribuyeron el hecho a la intermediación de su virgen. Para conmemorar el milagro se colocó una sencilla cruz en ese lugar. Conocemos muchos datos de esta historia gracias al manuscrito de Don Mosén Juan Artés del siglo XVI, y al Libro de la Cofradía de la Virgen.