Ofrenda de la mañana
Querido Señor, no sé qué me pasará hoy.
Sólo sé que no sucederá nada que no haya sido previsto por ti,
y dirigido a mi mayor bien desde toda la eternidad.
Adoro tus santos e insondables planes y me someto a ellos
con todo mi corazón por amor a Ti,
al Papa y al Inmaculado Corazón de María.
Amén.